LAS CINCO VOCES

Los hechos hablan más fuerte que las palabras. Nuestros hechos son fruto de lo que llevamos dentro. Podemos modular las palabras y a veces incluso mentir para dar una buena impresión. Sin embargo, los hechos no mienten, ya que hablan por sí solos.

Hace unos días, de forma inesperada, encontré un pasaje de la Escritura que parece indicar que Dios también piensa que los hechos hablan. Investigué un poco más sobre el tema y encontré secciones en la Escritura que describen otras cosas que también "hablan".

El dinero habla

Este pasaje advierte que el dinero que paguemos de menos a un trabajador de forma injusta "habla" y su voz llega a oídos del Señor:

Pero claman contra ustedes los sueldos que, con engaños, no han pagado a los que trabajaron levantando sus cosechas. ¡Y el clamor de esos trabajadores ha llegado a los oídos del Señor de los ejércitos! Aquí en la tierra, ustedes han vivido rodeados de placeres, y lo único que han logrado es engordar para el día de la matanza.

Santiago 5:4 RVC

La sangre derramada habla

Esto es lo que textualmente Dios le dijo a Caín después de haber asesinado a su hermano Abel:

"Y el Señor le dijo: ¿Qué es lo que has hecho?

Desde la tierra, la voz de la sangre de tu hermano

me pide que le haga justicia".

Génesis 4:10 RVC

El pecado habla

Así que el Señor le dijo a Abraham:

-He oído un gran clamor desde Sodoma y Gomorra,

porque su pecado es muy grave.

Génesis 18:20-21 NTV

La injusticia habla

Los israelitas … gemían bajo su pesada carga (del Faraón),

profundamente atribulados por la esclavitud,

y lloraban amargamente delante de Dios.

Dios oyó su lamento desde los cielos

… Los miró desde lo alto y decidió ayudarlos.

Éxodo 2:23-25 NBV

Dios habla

Porque Dios habla repetidamente en sueños, en visiones nocturnas,

cuando el sueño profundo cae sobre los hombres mientras yacen en sus lechos.

En tales ocasiones Dios les abre los oídos y les da sabiduría e instrucción,

haciéndoles cambiar de opinión, guardándolos del orgullo,

y previniéndolos sobre los castigos del pecado, y evitando que caigan en algún lazo.

Job 33:14-18 NBV

Pero ya Dios les ha dicho qué es lo mejor que pueden hacer y lo que espera de ustedes. Es muy sencillo: Dios quiere que ustedes sean justos los unos con los otros, que sean bondadosos con los más débiles, y que lo adoren como su único Dios.

Miqueas 6:7 TLA

Aunque la voz del dinero, la sangre derramada, el pecado y la injusticia llega a los oídos del Señor y parece despertar una reacción severa de parte de Él, no nos desanimemos, pues Dios también nos habla. Nos aconseja para prevenirnos y evitar que caigamos. Nos habla tiernamente instruyéndonos para que seamos misericordiosos con los demás.

Esta Semana Santa, afinemos nuestros sentidos para escuchar la voz más poderosa de todas, la voz del amor. Tanto nos amó nuestro Padre Celestial que nos dio a Jesús para que pagara nuestra millonaria deuda. Tanto nos amó Jesús que dejó su trono celestial para venir a rescatarnos. Y tanto nos ama el Espíritu Santo que, aun siendo santo, no le importa morar en nuestro corazón y ser nuestro maestro para guiarnos al Padre .

Oración: Jesús, abro mi corazón y recibo tu amor y tu perdón. Espíritu Santo, por favor ven y guíame al Padre.

Padre Celestial, gracias por tu paciencia y por tu amor infinito.

© Astrid Gale

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