LA REPETICIÓN CREA LA REPUTACIÓN
- astrid724
- 24 may 2022
- 1 Min. de lectura
Actualizado: 21 jun 2022
La repetición crea la reputación. Con esta frase iniciaba el profesor cada clase. Nos decía: “Pueden hablar cuanto gusten, sin embargo, es lo que hacen día tras día lo que forma su reputación”.
Nuestra reputación importa. Los versículos citados nos muestran a dos personas clave en el ministerio del Apóstol Pablo que fueron seleccionadas gracias a su buena reputación. El Nuevo Testamento no sería el mismo sin Silas cantando en la cárcel al lado de Pablo (Hechos 16:25-34), o sin su discípulo amado: Timoteo.
Si crees que Dios no te puede usar debido a que tu reputación no es buena te invito a que no te desanimes. Es justamente el Apóstol Pablo el que nos dice “Cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir” (Romanos 12:2).
El cambio en nuestra conducta viene de renovar nuestra mente con la Palabra de Dios. Esa renovación dará frutos y esos nuevos frutos crearán nuestra nueva reputación.
Celebremos la misericordia de nuestro buen Dios que nos da una oportunidad tras otra. Él, con su tierna paciencia, nos va transformando día con día para que el carácter de Jesús sea formado en nosotros.
Los hermanos en Listra y en Iconio hablaban bien de Timoteo,
así que Pablo decidió llevárselo.
Hechos 16:2
Escogieron a Judas, llamado Barsabás, y a Silas,
que tenían buena reputación entre los hermanos.
Hechos 15:22
© Astrid Gale
Comentarios